"Cómo Evitar Compartir en Exceso" Por Rick Qualls
Como dice la Biblia, “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora”.
Los
temblores de mis manos fueron especialmente malos cuando me senté en un grupo
de otros pastores. Era uno de esos días en los que “se necesitan dos manos para
sostener una taza de café”.
Todos
eran demasiado educados para preguntar. Pero sentí la necesidad de explicarme.
Y me ofrecí, “Mis manos tiemblan como un efecto secundario de mi medicina”.
Quería que entendieran que no estaba nervioso. Pero, por supuesto, después de
la explicación me puse nervioso. Y mi compartir hizo que todos se sintieran
incómodos.
No
era el tiempo ni el lugar para compartir esa información. Nadie lo había mencionado.
Nadie estaba mirando. Puede que nadie lo había notado. Se trataba más de mi
hiperconsciencia que la del grupo.
¿Alguna
vez te has encontrado compartiendo demasiado sobre tu enfermedad o tus
medicinas?
Saber
cuándo compartir es una cuestión de límites. Lleva tiempo construir relaciones
de confianza.
Un
lugar para ser completamente transparente es con tu psiquiatría o tu terapeuta.
Ellos necesitan saber la profundidad de lo que estás pensando y sintiendo.
Están ahí para ayudarte. Al no confiar completamente en ellos, no pueden
ayudarte a mejorar.
¿Cómo
podemos evitar compartir en exceso? Primero, considera la profundidad y la
calidad de tu relación. Las relaciones son recíprocas. ¿Es un nuevo conocido?
¿Un amigo casual? ¿Un amigo cercano? ¿Un amigo íntimo? ¿Es este un nivel cómodo
para compartir? ¿O es una relación del tipo “Vaya, ¿qué piensas del tiempo?”?
En
segundo lugar, ¿cuál es tu nivel de confianza con este amigo? Comparte según el
nivel de confianza que has desarrollado. La confianza se construye generalmente
a lo largo del tiempo y se pone a prueba en las relaciones. A medida que la
confianza se desarrolla, el compartir se puede profundizar. Con el tiempo,
aprendes qué comportamientos esperar de tu amigo y puedes compartir
apropiadamente.
En
tercer lugar, ¿cuáles son las expectativas límite de las relaciones? ¿Existen
expectativas de confidencialidad? Si eso no está claro, entonces sólo comparte
cosas que no te importaría que se repitieran. Con amigos íntimos y de confianza
puedes plantear el tema de la confidencialidad estableciéndola como un límite.
Finalmente,
¿es una persona segura? ¿Una situación segura? Las personas seguras te ofrecen
un espacio para ser tú mismo. Las personas seguras no intentan “arreglarte”. Te
ofrecen apoyo, no juicio. Las personas seguras no te evitan cuando te enfrentas
a dificultades o problemas. Las personas seguras te aceptan cuando estás
afligido, deprimido o pasando por otras pruebas.
¿Y
qué hay de esos días en los que “se necesitan dos manos para sostener una taza”?
¿Qué habría sido más útil que decir que mis medicamentos me causan temblores?
Durante
los momentos de estrés, a veces compartimos demasiado. En mi situación, estaba
ansioso por conocer a un grupo nuevo sin antecedentes juntos. Me preocupaba mi
posición en el grupo.
En
tu situación, ¿qué estrés estas sintiendo? Hubiera sido mejor estar consciente
de mis intensos sentimientos de autoconciencia, ir a un lugar tranquilo,
respirar profundamente varias veces y ser consciente de mis sentimientos. Y
luego cambiar mi enfoque en la tarea de grupo que tengo a la mano.
Aquí
hay algunas preguntas útiles antes de compartir.
¿Es
esto apropiado para las personas y el lugar?
¿Estoy
estresado por algo más?
¿Compartir
hará que las cosas mejoren o empeoren?
¿Cómo
responderé después de compartir?
Retirar
las palabras es como intentar volver a poner la pasta de dientes en el tubo. Es
complicado y no muy efectivo.
La
próxima vez que tenga un “día de dos manos para sostener una taza de café”,
esperaré y combinaré mi intercambio con el suyo.
Si
has compartido demasiado, relájate y no seas duro contigo mismo. Lo que está en
el pasado está ahí para ayudarnos a vivir mejor hoy.
Discúlpame
ahora. ¡Necesito otra taza de café!
(Preguntas
de Diane Gottsman en el Huffington Post)
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