"5 Ideas Para Perdonarte a Tí Mismo" Por Brad Hoefs
Cuando
tu cerebro no funciona correctamente, ciertamente afecta tu comportamiento, lo
que luego afecta tu relación con los demás. Aquellos de nosotros con un
problema de salud mental podemos terminar lastimando a muchas personas a las
que amamos. Ya sea a través de nuestras palabras o por algo que hayamos hecho,
los más cercanos a nosotros quedan heridos.
Aquellos
que han sido heridos, nos perdonarán y nos darán otra oportunidad; nos perdonarán,
pero ya no estarán en la relación o elegirán no perdonarnos y dejarnos. Y
terminamos sintiendo el profundo dolor que nuestro(s) comportamiento(s) ha(n)
causado tanto para ellos como para nosotros mismos. Es en este punto en el que
tenemos que tomar una decisión crítica; si nos perdonaremos o no.
Incluso
si los demás no nos perdonan, es importante que nos responsabilicemos de
nuestros comportamientos dañinos, pidiendo perdón y eligiendo perdonarnos a
nosotros mismos. Si no lo hacemos, terminamos estancados e incapaces de avanzar
en la vida bien. Todo el mundo se queda estancado a veces. Pero, quedarse
estancado no está bien. Por lo tanto, ser capaz de perdonarse a sí mismo es un
componente esencial para vivir bien a pesar de tener un trastorno del estado de
ánimo.
Estas
son algunas de las ideas que les ofrezco sobre “cómo” perdonarse a sí mismo
para poder avanzar en el buen vivir:
1.
Llega a esta conclusión: no importa cuánto lo intentes, no puedes cambiar lo
que ha pasado. Sólo puedes aprender de ello, crecer y seguir adelante. Acepta
lo que pasó.
2.
Asume la responsabilidad de lo que hiciste y el dolor que causó a otros,
pidiéndoles perdón. Incluso si deciden no perdonarte; debes perdonarte a ti
mismo. Perdonarte a ti mismo no puede depender de que ellos te perdonen.
Recuerda que el perdón de ellos va a ser un proceso, no es como encender o
apagar un interruptor de luz, así como perdonarte a ti mismo va a ser un
proceso.
3.
Si eres una persona de fe, entonces pídele a Dios, tu poder superior, el
perdón. Si está dentro de tu tradición de fe ir al clero y confesarle lo que ha
pasado, entonces te animaría a considerar hacerlo. A veces necesitamos escuchar
en voz audible a alguien con autoridad espiritual que Dios nos ha perdonado.
Si
Dios nos perdona (y lo hace), ¿quiénes somos nosotros para negarnos a
perdonarnos a nosotros mismos? Dios nos da el ejemplo. Así que sé amable
contigo mismo, como lo serías con un amigo cercano.
4.
Decide dejar de repetir una y otra vez en tu cabeza lo que ha sucedido.
Repetirlo no lo cambiará. Repetirlo una y otra vez es una forma de abusar de ti
mismo por lo que hiciste o dejaste de hacer. Decide que dejarás de permitir la
repetición en tu cabeza. Sí, es difícil de hacer. Pero, es posible. Tú y yo
podemos estar a cargo de lo que pensamos en nuestra vida de pensamiento. Al
principio, se sentirá como si fuera casi imposible de hacer. Con el tiempo,
será un poco más fácil.
Para
dejar de repetir una y otra vez lo que había hecho y cómo había herido a tanta
gente en mi vida, me discipliné para permitirme pensar en ello y lamentarlo dos
veces al día. Me prometí a mí mismo que sólo dedicaría 20 minutos cada vez.
Durante este período, escribí lo que pensaba en un diario. Al final de ese
tiempo, siempre dedicaba tiempo a la oración y a la lectura de algunas
escrituras cuidadosamente seleccionadas de la Biblia.
Revolcarse
en lo que pasó no te llevará a ninguna parte. Deja que esas pocas veces al día
hagan esto y luego sigue con tu día. No te quedes sentado dejando que tu mente “deambule”
por su cuenta. Hazte cargo. A medida que hagas esto, se hará más fácil.
5.
Con mi terapeuta, empecé a trabajar con cualquier problema emocional que tuviera
y que se estaba exacerbando por mi trastorno del estado de ánimo, que podía
trabajar con la esperanza de que me diera un avance en cualquiera de mis
conductas disfuncionales que eran perjudiciales para mis relaciones con los
demás. Con mucha frecuencia, tú y yo pensamos que nos comportamos de “cierta
manera” debido a nuestro trastorno del estado de ánimo. Sin embargo, la mayoría
de las veces, muchas de nuestras conductas se deben a problemas emocionales que
aún no hemos resuelto, y el trastorno del estado de ánimo simplemente intensifica
esos problemas. Además, si tú y yo no somos estables, podemos tener grandes
dificultades para controlar los impulsos. Así que, en mi opinión, es imperativo
que tú y yo trabajemos a través de tantos problemas emocionales y cualquiera de
las formas disfuncionales de estar en relaciones como sea posible.
Uno
de los problemas emocionales que tuve que resolver fue no odiarme a mí mismo.
No me gustaba nada a mí mismo. Tenía una cinta de padres muy crítica
reproduciéndose una y otra vez en mi cabeza. Tuve que borrar esa cinta. Y crear
una nueva cinta de adultos sanos. Llevó tiempo. Era un proceso. Y aún hoy, unos
20 años después, esa cinta de padres tan crítica se reproduce un poco aquí y
allá, pero dejo de escucharla rápidamente.
Estas
cosas me ayudaron a perdonarme a mí mismo. Espero que algunas de ellas puedan
ser de ayuda para ti. Es un proceso diario, pero puedes hacerlo. Recuerda, si
te dices a ti mismo, “No puedo perdonarme por eso”, entonces no te perdonarás a
ti mismo, y te quedarás estancado en ese punto. Si eliges no perdonarte a ti
mismo, entonces no avanzarás en tu vida. Sin perdonarnos unos a otros, ¿dónde
estaríamos todos? Vivimos en un mundo roto que necesita perdonarse y perdonarse
a sí mismo.
¿Qué hay de ti? ¿Necesitas perdonarte a ti mismo? ¿Ya te has perdonado?
Si es así, ¿cómo lo hiciste? (¡Te
animamos a que dejes un comentario o pregunta!)
Fresh Hope es una organización sin fines de lucro basada en la fe que permite a las personas vivir bien a pesar de su reto de salud mental.
TU regalo proporcionará a una persona Nueva Esperanza de Dios para la vida diaria. Haz clic aquí para donar, hoy.
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