"La Depresión Miente" por Rick Qualls
La Depresión miente. Toma nuestros pensamientos y los terjiversa hasta que se convierten en una cadena que nos ata. Los pensamientos distorsionados nos evitan que consigamos la ayuda que necesitamos.
Una mentira de la depresión es: Nunca me pondré bien. Esta mentira nos encierra en un sentido de desesperanza. Otros pensamientos luego seguirán: de nada servirá buscar ayuda y no hay nada que yo pueda hacer para mejorarme.
La verdad es que usted puede mejorarse. Hay ayuda para la depresión. Hay cosas que usted puede hacer para manejar su depresión.
Aquí hay algunos versículos Bíblicos que hablan justo de este asunto. El Salmista quien está en un pozo de destrucción escribe: "Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, y confiarán en Jehová." Salmos 40.1-3
Una segunda mentira es que pensamos que debemos mejorarnos por nosotros mismos. Nuestra cultura valora altamente la independencia. Muy a menudo, buscar ayuda es visto como señal de debilidad.
La verdad es que necesitamos ayuda para manejar la enfermedad depresiva. Se necesita fuerza para llegar a otros, tales como doctores, terapistas, amigos y otros. Las personas exitosas, independentemente de su situación, construyen un equipo.
Dios nos creó a cada uno de nosotros diferente el uno del otro, cada uno con diferentes fortalezas y debilidades. Estas diferencias no se nos dan para dividirnos sino para que nos sirvamos el uno al otro. Usted necesita a otros, otros le necesitan a usted.
La Biblia usa la imagen de un cuerpo para describir nuestra relación unos con otros. “Porque si todos fueran un solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo? Pero ahora son muchos los miembros, pero el cuerpo es uno solo. Ni el ojo puede decir a la mano: No te necesito, ni tampoco la cabeza a los pies: No tengo necesidad de vosotros." 1 Cor 19-21.
Una tercera mentira es que somos débiles si tomamos medicamento. Muchos se resisten a tomar medicamento para la enfermedad mental.
La verdad es que tomamos insulina para la diabetes. Tomamos antibióticos para las infecciones. La depresión es una enfermedad. Nos afecta mentalmente terjiversando nuestros pensamientos, nuestro ánimo se vuelve bajo, físicamente no procesamos tan rápido, las funciones del cuerpo se hacen más lentas. Hay evidencia de que independientemente de la fuente de la depresión, la química cerebral es cambiada, como lo son las vías neurales.
La medicación es un regalo que Dios nos ha dado por medio de las investigaciones científicas. Con otras enfermedades buscamos el mejor tratamiento. Cuando mi doctor me ha recetado medicamento me lo he tomado y lo he encontrado útil. Yo le animaría a considerar eso como una posibilidad si su doctor y sus consejeros se lo recomiendan.
"El sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas." Salmo 147.3
Fresh Hope es una organización sin fines de lucro basada en la fe que permite a las personas vivir bien a pesar de su reto de salud mental.
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