"¿Cuándo Fue La Última Vez Que Te Sucedió Algo Así?" por Jason Moore
Hace unos años, me encontré con una reseña en Google sobre nuestra iglesia. Empezaba muy bien. El autor era elogioso sobre la amabilidad de nuestra comunidad, la hospitalidad de nuestra gente, los ministerios de la iglesia, etc. Incluso lanzó algunos elogios hacia mí. Luego, el mensaje se volvió desagradable.
No me habría sorprendido tanto el cambio negativo en el tono y el contenido si me hubiera dado cuenta de que el mensaje estaba escrito por alguien que utilizaba un nombre falso. Fue chocante leer las falsas suposiciones y las medias verdades. Aunque este tratado era en su mayor parte desinformación, malinterpretación y tergiversación, las palabras seguían doliendo.
Tras el escozor inicial, me di cuenta de quién había escrito la reseña y supe lo que había sucedido para inspirar este mordaz informe. Al final, resultó ser una respuesta inmadura a una ofensa infligida por alguien que no era yo. Sin embargo, yo (y mi esposa) fuimos criticados cruel e injustamente.
Para ser justos, había algunas afirmaciones poco halagadoras que eran realmente ciertas. En última instancia, la gran mayoría del mensaje era inexacto. Sin embargo, provocó una respuesta de vergüenza y abrió algunas heridas. La verdad es que todos entramos en el ministerio como personas defectuosas y caídas. Nuestras historias están llenas de golpes y magulladuras. Todos nos hemos enfrentado a bravucones en el camino. Cada uno de nosotros ha soportado su parte de trauma, dolor y arrepentimiento. Nuestros corazones se han roto y todas nuestras cicatrices no están completamente sanadas.
Tenemos heridas en el corazón que quedan perpetuamente expuestas cuando experimentamos los insultos, las adversidades, la persecución y las dificultades que se presentan en el ministerio pastoral. Las luchas y las cargas del ministerio agravan las viejas lesiones Y causan nuevas heridas. Personalmente, anhelo ser como el apóstol Pablo. Quiero creer de todo corazón que la gracia de Cristo me basta y que el poder de Dios se perfecciona en la debilidad. Me gustaría ser implacable y resistente cuando la espina se clava y mi alma se siente cansada. A lo largo de mis años en el ministerio no siempre he tenido los recursos y el apoyo que necesitaba.
Es por eso por lo que Fresh Hope for Pastors está introduciendo un nuevo programa para los líderes del ministerio llamado Sanando las Heridas del Corazón del Ministerio. Sabemos que servir al Señor en el ministerio vocacional puede ser abrumador. Con frecuencia, los pastores tratan de agachar la cabeza y seguir adelante. La mayoría de las veces, lo hacemos aislados de los demás. Después de todo, las ovejas tienen dientes y a veces es tu propia congregación la que hace mucho daño.
Necesitas un entorno seguro en el que puedas compartir tu historia con compañeros que te comprendan. Está bien no estar bien. Nuestros retiros sobre las heridas del corazón ofrecen la oportunidad única de que los pastores y sus cónyuges bajen la guardia y se sinceren con personas que serán empáticas y alentadoras. Además, los participantes no solo se beneficiarán durante el tiempo que estemos juntos. Nuestro objetivo es enviarles de vuelta al campo con herramientas y recursos que les ayudarán a mantener la esperanza y la alegría incluso cuando se enfrenten a los desafíos del ministerio.
Lamentablemente, los pastores y los cónyuges soportan el rechazo, las críticas y los ataques. Pasamos por ciclos de dolor y pérdida mientras cargamos con el peso de las personas que amamos y servimos. Es un trabajo duro que provoca mucho daño. Es fundamental que los pastores y sus familias se mantengan sanos a pesar de las heridas del corazón.
Nuestro equipo de pastores, cónyuges, expertos en traumas y especialistas en salud conductual se compromete a cuidar de ti mientras exploramos las formas en que puedes disfrutar de un ministerio fructífero y aumentar la longevidad de tu vocación.
¿Cuáles son algunas de las heridas más significativas que el ministerio ha expuesto o infligido?
¿Cómo han surgido las heridas del pasado al enfrentar los desafíos del ministerio?
¿Cómo afrontas el dolor y encuentras esperanza en medio de tus luchas? ¿Quién te recuerda la resurrección y la restauración de Cristo?
Jason Moore
Director de Fresh Hope for Pastors
Jason es un ministro ordenado en la Iglesia Presbiteriana en Estados Unidos. Jason es un ex plantador de iglesias y un entrenador de pares certificado. Vive con un trastorno del estado de ánimo y camina junto a los pastores que se enfrentan a los desafíos del agotamiento, la ansiedad, la depresión y otros problemas de salud mental y emocional.
Artículo Original:
Fresh Hope es una organización sin fines de lucro basada en la fe que permite a las personas vivir bien a pesar de su reto de salud mental.
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